Columna “Lunes de mujeres”: DISMENORREA, CUANDO LA MENSTRUACIÓN ES DOLOROSA

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Llegamos a la trigésima tercera cita de la columna «Lunes de mujeres», que sale cada primer lunes de mes. En los últimos meses hemos hablado en profundidad de las irregularidades menstruales, analizando en detalle los cambios de ritmo, la cantidad de flujo, el color de la sangre y su calidad. Y hoy empezamos a hablar del dolor menstrual, que afecta a más mujeres de las que pensamos, pero que en nuestra sociedad muchas veces se considera normal (quizás porque a nuestra madre le pasaba lo mismo, o a nuestra hermana, a nuestra amiga, a nuestra compañera de colegio, …), y por eso a veces nos tomamos un analgésico y no hacemos nada más, porque «así es para todas».

Pero no, no es así para todo el mundo y no debería ser así para nadie, porque el dolor es sólo la manifestación de algo, una señal que el cuerpo está enviando. Aunque sí puede haber una hinchazón abdominal y una sensación de pesadez, porque al fin y al cabo el útero se llena de sangre, por lo que no sólo pesa más, sino que también aumenta su tamaño.

(photo credit: jujuwebsite)

El término dismenorrea indica la aparición de un flujo menstrual acompañado o inmediatamente precedido de síntomas dolorosos en la región pélvica o lumbosacra, a veces asociados a molestias generales. Por tanto, no se trata de la sensación normal de tensión y molestias en el bajo vientre y la espalda que puede acompañar a la menstruación, normalmente soportable y en todo caso limitada al primer día, sino de dolores tan violentos que impiden las actividades normales. Las mujeres que padecen dismenorrea tienen calambres violentos y profundos en la parte inferior del abdomen, en correspondencia con el útero, con sensación de peso; el dolor es espasmódico o cólico, parte de la región suprapúbica y se irradia a las caderas, a la región sacro-glútea uni o bilateralmente y a los muslos; en algunos casos se acompaña de náuseas, vómitos, diarrea, dolor de cabeza, sensación de irritabilidad o embotamiento. Estas manifestaciones comienzan a las pocas horas del inicio de la menstruación, pero pueden precederla entre 12 y 24 horas, generalmente duran 24 horas, a veces persisten durante dos o tres días y sólo raramente superan los tres primeros días del flujo.

Existen dos tipos principales de dismenorrea:

  • dismenorrea primaria: suele comenzar durante la adolescencia, está causada por factores intrínsecos a la fisiología uterina y, por tanto, no está asociada a ningún trastorno orgánico. El dolor persiste en la adolescencia y se reduce mucho después del parto, hasta el punto de desaparecer; sin embargo, con los años tiende a reducirse espontáneamente;
  • dismenorrea secundaria: se manifiesta más tarde en la vida, es una forma de dismenorrea, generalmente grave, asociada a enfermedades pélvicas orgánicas como la endometriosis, las adherencias posquirúrgicas, la inflamación pélvica crónica, los tumores, los quistes ováricos, las malformaciones, la presencia de dispositivos intrauterinos, …

La dismenorrea es un trastorno específico de los ciclos ovulatorios, por lo que la menstruación no es dolorosa en los primeros meses después de la menarquia. La dismenorrea puede aparecer desde el inicio de los ciclos ovulatorios, normalmente entre uno y dos años después de la menarquia, y tiene distintos grados de severidad. El dolor menstrual depende de la acción de las prostaglandinas, que normalmente aumentan durante la fase menstrual y provocan una violenta contracción del útero, fenómeno que conduce al bloqueo de la circulación sanguínea (isquemia) en el útero, condición que parece ser la causa principal del dolor.

Dismenorrea y medicina china

Si me conoces o me sigues desde hace tiempo, sabes que en 2007 fui a China para practicar Tuina en hospitales y así experimentarlo directamente sobre el terreno, con la posibilidad de recibir consejos directamente de los médicos que lo practican a diario en una gran variedad de casos problemáticos. Cuando estuve en el Second Provincial Hospital of TCM, Jiangsu Province – Nanjing, me puse en sintonía con el Dr. Wang Jian Min: era un hospital pequeño, venían menos pacientes, y de vez en cuando había algo de tiempo libre, incluso unos minutos (lo que nunca ocurría en hospitales más grandes, dada la cantidad de pacientes que llegaban cada día); así que podía pedirle al Dr. Wang información o consejo.

Le conté que estaba preparando mi tesis de fin de carrera en la escuela de Tuina y que estaba siguiendo a una chica que sufría dismenorrea, y al día siguiente llegó al hospital con un viejo cuaderno desgastado y escrito a mano: era su cuaderno de cuando estaba en la universidad, y en los descansos sacaba el cuaderno y me explicaba todo lo que sabía sobre el dolor menstrual.

Para la medicina china, la dismenorrea es un reflejo de la vida laboral y, cuando el dolor es intenso, el tratamiento es más difícil y largo. El dolor puede producirse antes, durante o después de la menstruación; hay dolor porque hay una obstrucción. De hecho, hay una frase muy famosa entre los practicantes de la medicina china que describe el mecanismo del dolor según la medicina china: bú tōng zé tòng, tōng zé bú tòng. Es difícil traducir esta frase literalmente, porque cada carácter tiene muchos significados; sin embargo, la frase juega con la asonancia entre los dos caracteres tōng (que significa “paso”) y tòng (que significa “dolor”), cuyo sonido sólo difiere en el tono y cuya ortografía revela más explicaciones. El componente interno es el mismo en los dos caracteres, y entre sus significados en la lengua clásica está el de «camino»; en el carácter tōng el otro componente es el radical «ir», de ahí camino libre, sin obstáculos, fluyendo, pasando, mientras que en el carácter tòng el otro componente es el radical «enfermedad», de ahí camino anormal, enfermo. Es decir, si los meridianos (que son las vías del interior del cuerpo humano, por donde deben fluir el qi y la sangre) están obstruidos, surge el dolor, y para eliminarlo habrá que liberarlos, favoreciendo el flujo de qi (energía) y xue (sangre).

Hay tres causas principales que contribuyen al dolor menstrual.

ESTANCAMIENTO DE QI Y XUE: en el 70% de los casos hay estasis de qi de Hígado. Se manifiesta con dolor en el bajo vientre antes de la menstruación, el flujo es escaso y grumoso, de color oscuro; el dolor desaparece con la expulsión de la sangre y la mujer puede presentar también dolor en el pecho y en el hipocondrio; el color de la lengua es violáceo.

HUMEDAD Y FRÍO: la primera causa es vivir en un lugar frío y húmedo, pero bañarse durante la menstruación, nadar, salir a la calle bajo la lluvia, comer helado y fruta fresca y beber agua fría también puede aumentar el dolor menstrual. Todos estos son factores externos, pero el frío y la humedad entran en el útero, el frío contrae y congela la sangre, por lo que la sangre y el qi se bloquean. Se manifiesta con dolor y frialdad en el bajo vientre, menstruación escasa, de color rojo-púrpura oscuro; la mujer tiene las manos y los pies fríos, a menudo también las caderas, y prefiere el calor; la lengua muestra una pátina lingual blanca, húmeda y pegajosa.

VACÍO DE QI Y XUE: la mujer suele estar ya en Vacío  constitucionalmente y la salida de sangre empeora la deficiencia; se relaciona con astenia por falta de qi y xue, falta de apetito e insomnio. Se manifiesta con menstruaciones escasas y ligeras, de color pálido; el dolor es fijo, sordo pero no fuerte, y suele presentarse después de la menstruación; la lengua es pálida.

Ya hemos dicho que el dolor no es normal, no debería estar ahí, así que podemos tomar medidas para cambiar la situación, en lugar de apañarnos tomando analgésicos, ya que no solucionan el problema en su raíz. Por ejemplo, una vez que hemos establecido que se trata de una dismenorrea primaria y que no hay problemas a nivel orgánico o estructural, podemos hacer sesiones de Tuina, pero también hay muchos trucos y pequeñas cosas que podemos hacer por nuestra cuenta, y de las que hablaremos la próxima vez. Así que, si sufres de dolor menstrual, ¡no te pierdas el próximo número de la columna!

Ahava, Francesca Zangrandi

PD. La próxima cita de esta columna será el primer lunes de octubre, pero, mientras tanto, si deseas mantenerte actualizada sobre los diversos artículos que publico en el blog, puedes suscribirte al boletín en la página web www.quintadimensione.net, poner “Me gusta” en la página Facebook Quinta Dimensione – Francesca Zangrandi, seguirme en mi Instagram https://www.instagram.com/francesca_quintadimensione/ o puedes suscribirte al canal de YouTube Francesca Quinta Dimensione. Y si crees que este artículo pueda interesar a alguien que conoces, puedes compartirlo. Muchas gracias!

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