Mañana con la luna nueva en Géminis comienza un nuevo ciclo lunar: la etimología de la palabra «géminis» proviene del latín «geminus», que se refiere a los hermanos gemelos, pero también podemos distinguir la raíz griega «gamos», que se refiere a hierogamos, es decir, el matrimonio entre hombre y mujer, recordándonos, por lo tanto, que solo la unión de estas dos partes dentro de nosotros nos llevará a ser completos.

El signo de Géminis es el signo de la comunicación y nos conecta con el poder de la palabra, ayudándonos a expresar quiénes somos y qué queremos, por lo que esta lunación nos pide coherencia entre lo que pensamos, sentimos y hacemos; nos pide comunicar nuestras emociones, incluso aquellas que nos pueden poner en contacto con nuestras cosas profundas.
Y para los indios americanos, la Madre Clan de este ciclo lunar es Cuentacuento, la preservadora de hablar de acuerdo con la experiencia personal, que nos enseña a hablar en verdad, comunicándonos desde el corazón; ella nos muestra la fe que necesitamos para abrirnos camino a través de nuestras confusiones y nos enseña cómo ser estudiantes y maestros en la vida.

Esta lunación también nos prepara para el próximo ciclo de eclipse, por lo que no sólo nos invita a conectarnos con nuestra voz auténtica, sino también a limpiar nuestros pensamientos y creencias, para cruzar con ligereza los portales de los próximos eclipses, sin el peso de lo que ya no nos corresponde.
Por lo tanto, tenemos todo este ciclo lunar para sanar nuestra palabra y usarla con amor para expresar y verbalizar lo que necesitamos para vivir nuestras vidas y nuestras relaciones.

En este sentido podemos preguntarnos: ¿qué es lo que pienso con frecuencia? ¿Qué energía tienen mis pensamientos? ¿Cómo me hacen sentir? ¿Y qué palabras uso generalmente? ¿Qué vibración tienen las palabras que uso? ¿Cómo me hacen sentir? ¿Qué palabras utilizo cuando converso con los demás? ¿Utilizo palabras que nos alimentan de belleza o palabras que perturban o incluso destruyen?

Todavía estamos en la temporada de Beltane y una diosa que se celebra en esta época del año es Rhiannon, cuyo nombre significa Gran Reina; ella es la guardiana de nuestros auténticos «sí» y «no», la que nos ayuda a definir nuestros límites saludables, para ser más auténticos a medida que avanzamos en nuestras profundidades.
Sin embargo, mientras que en mayo tuvimos tiempo de entender quiénes somos, qué nos gusta hacer, qué nos sale bien, qué es lo que realmente alimenta nuestra alma y nos hace sentir vivos, ahora es el momento de expresarlo, de verbalizarlo, de decirlo en palabras. Entonces, ¿qué nos gustaría decirle al mundo de nosotros? ¿Qué es lo que queremos decirle al universo de nosotros mismos y qué es parte de nuestra antigua identidad y no queremos decirlo más? ¿Cómo podemos llevar nuestra palabra a una nueva vibración?

Deseándote una feliz luna nueva, te dejo con un escrito de Jamie Sams,
Francesca Zangrandi

“Cuéntame una historia, dulce Madre,
sobre los antepasados ​​y sus días,
de cómo anduvieron los caminos de la Medicina.
Y mientras cuentas,
puedo ver
la importancia de cada lección
y como está hecha para mí.
Del ejemplo de otro
saco risas y lágrimas.
De la experiencia de otro
aprendo que el amor puede dominar el miedo.
Juntos viajamos
a través de esos tiempos,
llamándo hacia nosotros toda sabiduría
dejada por los que nos precedieron.”